- Lo primero de todo, es centrarte en tu objetivo.
Decide qué es lo que quieres comunicar, cuál es tu principal interés: darte a conocer, vender tus productos, obtener reconocimiento, generar confianza, dar tu opinión, socializar, etc.
Sea lo que sea, está bien. No pienses qué es lo que tendrías que querer conseguir, qué sería lo deseable en tu situación. Piensa en lo que quieres de verdad, en lo más profundo de tu ser.
Una vez que ya lo tienes claro…
2. Piensa cuál es tu fuerte al comunicar: la claridad, la amabilidad, la dulzura, la simpatía, la seguridad, credibilidad…
Seguro que ya lo sabes, y si no lo tienes claro, pregunta a tus amigos y familiares, a las personas que te rodean, a conocidos de redes sociales con los que tengas más confianza, qué es lo que mejor les llega de ti. Cuáles son las cualidades que transmites y te hacen especial. Seguro, seguro, que las tienes, como las tenemos todos.
Una vez que ya lo tienes claro…
3. Diseña un plan para compartir y comunicar aquello que te interesa y que te dirija a tu objetivo, teniendo en cuenta que, la mejor forma de hacerlo, es desde lo que tú eres. Para ello utiliza aquello que te resulta fácil y que sabes que llega de ti a los demás.
Si te inspiras en otras personas, que sean personas parecidas a ti, con las que puedas identificarte. Si no, será un suplicio y no llegarás con la misma coherencia a tu público.
Espero que estos consejos te ayuden a dar un salto en tu comunicación.
Gracias por tu confianza en mí.
